¿Te enconges la espalda mientras trabajas o sientes que cargas una mochila todo el tiempo?
Si la respuesta es sí, entonces eres víctima del estrés que, a largo plazo, genera dolor de hombros y cuello desagradable.
En un episodio de estrés, los hombros se elevan y bloquean, tensando los músculos, particularmente los músculos de la parte posterior del cráneo; lo que provoca un dolor generalizado del cuello, hombros y espalda.
1. ¡Estira tus hombros!
Lleva tus hombros hacia detrás suavemente poniendo las manos detrás y mantén la postura 30 segundos. Repite varias veces al día.
2. Auto-masaje para aliviarte la tensión
Con tu mano izquierda aprieta tu hombro izquierdo, e inclina la cabeza levemente a la derecha y la izquierda lentamente. Con tus dedos ve haciendo pequeños y suaves apretones del cuello al hombro. Realizado 1 vez en cada lado. Repite varias veces al día.
3. Tratamiento Individualizado de un Fisioterapeuta.
Déjate tratar por un profesional del sector: un fisioterapeuta es el profesional de la salud más indicado. Sus conocimiento serán un valor seguro para curarte. Es la mejor inversión en salud que vas a poder hacer. Tu cuerpo y tu mente lo agradecerá.
4. Ponte en movimiento
El ejercicio y los estiramientos son muy eficaces para eliminar el dolor de hombros. Tu Fisioterapeuta te asesorará en todo lo que necesites. Recuerda, al hacer ejercicio aumentas el suministro de sangre en esta área del cuerpo.
5. Procura dormir bien
Un sueño reparador puede ayudarte a enfrentar mejor la agitación un día, con lo que previenes el dolor. Si no puedes dormir, coloca en tu almohada unas gotas de esencia de lavanda. ¡Te será de ayuda!
El dolor de hombros suele aparecer tras experimentar estrés de forma crónica, por lo que debes tratar de mantener esta emoción en control.
Penadés Terapia