La dismetría de las piernas es una alteración de la longitud de extremidades inferiores. A veces, puede suceder que sí tengas una verdadera pierna corta. Pero lo normal es que tu pelvis o columna vertebral estén en desequilibrio, y por eso tengas lo que se conoce como falsa pierna corta.
En este artículo te contaré como diagnosticarla, que complicaciones te puede traer, y saber si necesitas o no ponerte un alza.
¿Cómo puedo saber si tengo una pierna más corta?
Tener una pierna más corta que otra no es algo frecuente. Solo una prueba de telemetría, no una radiografía, permitirá diagnosticar con exactitud si las piernas tienen diferente longitud. De hecho, como veremos sólo en un pequeño porcentaje de casos necesitarán corregirse con un alza o plantilla.
Las primera pregunta a resolver es: ¿Realmente tengo una pierna más corta? ¿La dismetría es real o ficticia? Y de ser real te has de preguntar:
- ¿Cuál es la causa?
- ¿Cúal es la magnitud del desequilibrio? y ¿cuál el hueso alterado?
- En los pacientes en crecimiento… ¿Cuál será el pronóstico al llegar a la madurez?
Definición de dismetría o verdadera pierna corta
La dismetría de los miembros inferiores es la diferencia en la longitud de uno o varios segmentos de una extremidad con respecto a los de la contralateral, bien sea por exceso (hipermetría), o por defecto o acortamiento (hipometría), algo mucho más frecuente.
Se diferencian dos tipos:
- Real: existe una diferencia de longitud en uno o varios segmentos de la pierna.
- Ficticia: las piernas parecen desiguales pero la causa de esa apariencia no está fundamentalmente en la desigualdad de las piernas, que pueden medir lo mismo, sino en alteraciones a otro nivel como por ejemplo:
- limitación coxofemoral (en aducción) por coxartritis
- necrosis
- epifisiolisis
- pelvis oblicua fija (báscula pélvica) generalmente debida a deformidades idiopáticas, neurológicas y/o congénitas del raquis lumbosacro.
- escoliosis
Si consideramos dismetrías verdaderas sólo a aquellas en las que los huesos son de diferente longitud, también podemos considerar dismetrías ficticias aquellas en que la dismetría viene dada por una patología articular, generalmente una inestabilidad.
El plan terapéutico será completamente diferente en función de que se trate de una dismetría real o no. Diferenciar entre un tipo u otro resulta fundamental ya que el tratamiento será muy diferente.
¿Qué dicen los estudios médicos en este tema?
Existen estudios con exámenes electromiográficos que demuestran que hasta en 1 cm de disimetría existe una compensación espontánea que no revela contracciones musculares, generándose un equilibrio espontáneo.
Si este equilibrio se rompe pueden aparecer síntomas de algias lumbares o sacroilíacas e incluso ciática. El humano puede mantenerse sin excesiva fatiga por la función de sus ligamentos, tendones y cápsulas articulares. (Florenciano et al., 2009).
Si tengo una dismetría real, ¿me he de poner un alza?
Sí, te has de poner un alza, en el caso de que tengas más de 2-3 cm de diferencia entre las dos piernas para la compensación, sin embargo, no existe ningún protocolo que esté reconocido, se basa en la decisión del tratamiento en tres factores:
- Experiencia clínica del profesional
- Sintomatología del paciente
- Valor de la disimetría
Aun así, se proponen las siguientes recomendaciones sobre su uso:
- La cantidad de elevación se basará en la respuesta del paciente según su clínica. No se compensará la totalidad de la disimetría, recomendando compensar aproximadamente el 61% de la diferencia.
- La compensación debe implementarse de forma gradual, siendo más conservadora y progresiva en pacientes de edad avanzada.
- Con alzas de talón la efectividad de elevación es del 76,4% de su grosor, por lo que se recomienda aumentar un 23,6 % el valor del alza de talón a emplear, o tomarlo en consideración. Pudiéndose utilizar alzas de talón cuando el grosor del alza no supere los 10 mm de grosor.
- Se podrán compensar con alzas y modificaciones en el calzado elevaciones de hasta 3 cm. A partir de este valor se necesitará la utilización de un calzado a medida. La Cantidad máxima de alza tolerada dentro del zapato es aproximadamente un centímetro, siendo necesario la actuación en antepié o calzado en mayores volúmenes de elevación.
Complicaciones de una dismetría o pierna corta real
- Caminar: Hasta 2-3 cm de diferencia pueden ser bastante bien compensados por el paciente sin que la marcha quede significativamente alterada. Diferencias mayores producen siempre marcha alterada y requieren tratamiento.
- Dolor de espalda: dismetría de menos de 3 cm. es muy raro que produzca dolor de espalda (casi siempre lumbalgia). Además, las personas (salvo excepciones) estamos en de pié estática solo un pequeño porcentaje del tiempo con lo que, a ese respecto, la DEI (sobre todo si es leve) tiene una importancia relativa.
- Escoliosis: Por las mismas razones mencionadas justo arriba, es muy improbable que una DEI de menos de 2-3 cm se pueda considerar responsable de la producción de una escoliosis u otra deformidad estructural raquídea.
- Artrosis: puede generar sobre la cadera de la extremidad más larga que, al quedar descubierta, puede desarrollar una artrosis.
- Autoestima: Es evidente que cualquier deformidad del esqueleto puede producir algún tipo de complejo psicológico en el individuo que la padece y éste será mayor cuando más evidente sea aquella.
Las personas pueden compensarla por sus propios medios (leves flexión del miembro largo o marcha en equino…) en casos de hasta 2 cm aproximadamente.